Esta pequeña imagen de San Antonio de Padua está realizada en madera, policromada y estofada, pertenece a una colección particular.

La intervención se dividió en diferentes fases.

La primera actuación que se llevó a cabo fue el asentamiento de la policromía y de los estofados mediante espátula térmica, pues corrían serio riesgo de desprendimiento.

Se realizó una suave limpieza mecánica y química. Así mismo se estucaron aquellas lagunas donde había perdido partes del estofado y la policromía, así como pequeñas fisuras.

Por último se reintegró las partes donde había perdido la policromía y los estofados originales.

Se limpió el ramillete de azucenas de plata y se eliminó el anterior barniz de la peana. Por último se barnizó el conjunto de la obra.